Ocúltate en las sombras, oh, descarado fantasma, tú que has muerto en vida y vives en muerte, para que pueda perderte de vista, ya que he notado que no puedo aplacar tu poder. Utiliza tus habilidades y hazme tropezar, una y otra vez, porque, ¿sabes qué?, eso será lo que me haga más fuerte.
Tu odio me dará valor y coraje, me hará levantarme después de cada caída, hasta que llegue un momento en el que mi voluntad sea más poderosa que tu envidia, y será entonces cuando ya no tengas nada que hacer más que morir.
Sofía Guerra